Cuautitlán, Izcalli.- En respuesta al desafío global que representa la candidiasis vaginal, enfermedad que afecta al 75% de las mujeres al menos una vez en su vida, investigadoras de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán de la UNAM diseñaron películas vaginales cargadas con nanopartículas de clotrimazol, un antimicótico de amplio espectro. Este desarrollo, liderado por la doctora Elizabeth Piñón Segundo y la maestra María del Rocío Lara Sánchez, busca superar las limitaciones de los tratamientos actuales, como óvulos y cremas, que suelen aumentar el flujo vaginal y reducir la adherencia terapéutica.
Innovación con nanotecnología
Las expertas del Laboratorio 13 de Sistemas Farmacéuticos de Liberación Modificada crearon nanopartículas poliméricas de acetato de ftalato de celulosa, capaces de transportar el clotrimazol de manera estable y liberarlo de forma sostenida durante 24 horas. “Estas nanopartículas son como un talco ultrafino, pero al integrarlas en una película mucoadhesiva, logramos que se adhieran al tejido vaginal incluso en presencia de flujo excesivo, un síntoma común en infecciones por Candida albicans”, explicó Lara Sánchez.
Ventajas frente a tratamientos tradicionales
Reducción de molestias: Las películas, delgadas y flexibles, evitan el goteo y la sensación de humedad asociada a cremas o óvulos.
Liberación controlada: Estudios in vitro confirmaron que el clotrimazol se libera gradualmente en un fluido vaginal simulado, manteniendo su potencia antimicótica.
Mucoadhesividad: Se adhieren a la mucosa afectada, optimizando la entrega del fármaco en el sitio de infección.
Impacto en la salud pública
En México, el 30% de las consultas ginecológicas están relacionadas con infecciones vaginales, según la Secretaría de Salud. Estos padecimientos no solo causan incomodidad física, sino también consecuencias psicológicas y económicas. “La candidiasis recurrente puede dañar el epitelio vaginal, aumentando el riesgo de infecciones por virus como el VPH o el VIH”, advirtió la doctora Piñón.
Próximos pasos
El equipo busca colaboraciones con la industria farmacéutica para escalar la producción y realizar ensayos clínicos. “Nuestro objetivo es ofrecer una alternativa accesible que mejore la calidad de vida de las mujeres”, subrayó Lara Sánchez.
¿Por qué importa?
Este avance científico no solo representa una solución innovadora para una condición prevalente, sino que también sienta un precedente en el uso de nanotecnología para optimizar la administración de medicamentos en ginecología, un campo donde la comodidad y la adherencia al tratamiento son cruciales.