Culiacán, Sinaloa.— La imposición de aranceles por parte del gobierno de Estados Unidos podría provocar un colapso en la producción de granos en México, especialmente en Sinaloa, alertó Agustín Espinoza Lagunas, secretario general de la Coordinación Organizadora de la Unidad Campesina (COUC). Durante una conferencia de prensa, el dirigente delineó un panorama crítico para el campo nacional, afectado por prácticas desleales, desatención institucional y fenómenos climáticos adversos.
Espinoza Lagunas denunció que el dumping de maíz estadounidense, vendido a precios por debajo del costo de producción gracias a subsidios, está desplazando al maíz blanco sinaloense, reconocido por su calidad y preferido para el consumo humano. “No es justo competir con un producto subsidiado. Urge una denominación de origen para proteger nuestro maíz blanco”, exigió.
Además, advirtió que los aranceles estadounidenses incrementan los precios de exportación, disminuyendo la competitividad de los productores nacionales frente a mercados internacionales.
Crisis en maíz, trigo y arroz
El líder campesino subrayó que la producción de maíz, trigo y arroz se encuentra en riesgo, no sólo por las importaciones masivas, sino también por la falta de apoyos estructurales, como subsidios adecuados, créditos accesibles y programas de modernización tecnológica. En particular, señaló que la dependencia en la importación de maíz amarillo compromete la viabilidad de los agricultores mexicanos.
“El impacto es directo en la economía rural. La caída de precios, la falta de liquidez y la incertidumbre podrían generar pérdidas irreparables para miles de familias”, sostuvo.
Demandan cumplimiento de apoyos y revisión de tratados
Espinoza Lagunas también denunció el incumplimiento del gobierno federal en los pagos de apoyos extraordinarios por tonelada prometidos a los productores de maíz. Se trata de 750 pesos por tonelada, más 200 pesos por cobertura, cuya dispersión, señaló, ha sido lenta e incompleta.
“Los productores ya no están en ánimo de seguir aguantando. Podría haber un estallamiento social si no se resuelve este tema”, advirtió.
En este contexto, reconoció las gestiones del gobernador Rubén Rocha Moya y del secretario estatal de Agricultura, Ismael Bello Esquivel, para agilizar la entrega de recursos, pero recalcó que la responsabilidad recae en la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), encabezada por Julio Berdegué.
Finalmente, el dirigente de la COUC advirtió que la desesperación de las bases campesinas podría rebasar los liderazgos tradicionales de las organizaciones, ante la falta de soluciones efectivas que permitan hacer frente a la sequía, los altos costos de producción y el retraso en los apoyos económicos necesarios para salvar el actual ciclo otoño-invierno.